miércoles, 22 de diciembre de 2010

FELIZ NAVIDAD

Algunos odian la Navidad. Os puedo asegurar que aquí donde estoy, en el camarote de mi barco, bajo el techo de Orión y en medio de la nada, sólo la Navidad tiene sentido. Miro a mi escasa tripulación y sé que algunos echan de menos estar en tierra, no sabéis cómo les envidio…

Estar proscritos no significa haber olvidado, como hacen tantos, y os puedo asegurar que la oscuridad en el mar es mucho más luminosa que la negrura de vuestras ciudades, donde no se ve nunca al de enfrente por la sencilla razón de que no se le quiere ver. La Navidad es querer querer, y no es una repetición.

Si no eres capaz de querer la Navidad, no la odies tampoco, y deja a los demás que sean personas ya que tú prefieres ser un saco de conchas vacías. Aquí sacaremos un odre de aguardiente de la Isla de la Tortuga, sajaremos unos cuantos erizos y brindaremos a la salud del cielo, sobre la calma chicha y el salitre. En mi navío es Navidad porque lo mando yo, que soy el corsario, y a quien no le guste que conquiste un barco para sí y lo haga navegar, y cuando esté en alta mar ponga sus normas y sea indigno, si le place, pero en este barco mío nos abrazaremos y cantaremos como si estuviéramos en casa, en la infancia, y si alguno llora cantaremos más alto aún. También para poder hacer esto nos embarcamos aquél día, no sólo para escapar del orden de los hombres.

5 comentarios:

  1. El que en tu navío es Navidad porque lo mandas tu, me parece un poco dictatorial.
    Mortal, no te arrogues meritos ajenos,la Navidad, las Saturnales o el Dies Natalis Solis Invicti, son Cronos y Artemisa o Saturno y Diana los que lo imponen, recuerda a Prometeo y no intentes emularlo, sic trasit gloria mundi.
    Diogenes el estoico y cinico también.
    Bon Nadal

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  2. Hola, Cícero,
    a ver, un corsario sin un poco de chulería no es un corsario, si no voy a tener que montar un albergue en vez de una ristra pirata, pero sé que lo dices con humor y yo también te quiero.
    Lo de los antecedentes antropológicos de la Navidad como solsticio y todos los dioses me encanta, de hecho habrás visto que brindo por el cielo y no por Belén, ha sido una concesión a la gran Navidad precristiana, incluidas las saturnales del mundo al revés, o postcristianas heterodoxas (obispillos, caballeros verdes, y los miles de ritos de transición estilo Mircea Eliade o Robert Graves). De todas formas, creo que los que odian la Navidad no es porque odien a Saturno ni a la Rama Dorada, sino por motivos mucho más presentes y con ésos me meto, sólo por incordiarles un poquito. A mí la Navidad no me entusiasma precisamente, pero nunca se me ocurriría querer amargar la fiesta a los que la viven con felicidad.
    Ah, y Bon Nadal!!

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  3. No, oye, Corsario, que Cicero soy yo. El de arriba no era yo, lo podrás comprobar por la IP, a pesar de que dice latinajos.

    Salgo mañana, no a la mar, sino a los cielos, mi reino, y no sé si llegaré a buen aeropuerto porque está nevando; por estas latitudes del norte llevamos días colapsados, aeropuertos cerrados, falta de anticongelante... En fin, no sólo de controladores vive el hombre.

    No soy creyente y hasta hace unos años aborrecía la Navidad -más que nada porque en mi infancia la Navidad no fue alegre casi nunca - , pero tengo una hija pequeña y eso cambia mucho las cosas, la Navidad es una hermosa fiesta perteneciente a nuestra cultura y me gusta que la disfrute, así que ella la disfruta al máximo y yo, por su alegría, también.

    Me gusta mucho la antropología, pero lo de los solisticios me da bastante igual, me interesa bastante más lo relacionado con la evolución,el paso del mono al hombre, tema que me fascina. Lo de los latinajos se lo alabo al anónimo, a mí me pierden.

    Que tengas una Feliz Navidad y disfrutes mucho en tu barco.

    Feliz Navidad a todos.



    Cicero

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  4. Hola Cesar, a pesar de que uno lleva las riendas del barco, otro nos lleva siempre a buen puerto , sin el no tiene sentido la Navidad,pero se ha metido dentro de cada uno de nosotros respetando nuestra libertad, la metafora del barco me gusta mucho porque la vida es como el mar, una aventura donde no siempre vislumbramos la salida hacia tierra firme y vamos zarandeados por toda clase de dificultades y tempestades pero no temamos, una mano nos sostiene . Feliz Navidad.

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  5. Hola a los dos, Cícero y Anónimo, he estado fuera de juego todos estos días, así que no os he contestado por eso. Espero que los aviones hayan hecho su función, y que el ángel de cada uno nos haya cuidado, y cada uno a sus ángeles. El barco está bien, por suerte sólo funciona con el viento y no le afecta la subida de la electricidad.
    Feliz Año!

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