(Antecedente: el juez del Olmo ha entendido que llamar “zorra” a una mujer no es un insulto pues cabe interpretarlo como ”astuta”, que es otra acepción de la palabra)
El tema no es para tratarlo con guasa, porque lleva a terrenos escabrosos. Pero a veces el esperpento nos lleva a entender mejor la realidad, y si no que se lo digan a Guillermo de Baskerville y los libros de Aristóteles en “El Nombre de la Rosa”.
Por eso eludiré el tema de la mujer ASTUTA y me referiré al de las ACEPCIONES. Miren, yo no sé qué ha pasado en la sentencia, ni qué hay del asunto de fondo, que seguro que da a alguno la excusa perfecta para contemporizar. Iré a otra cosa. Como hay que ser constructivo en la crítica, yo les propongo mirar para adelante y dar consejos a todos aquellos que vayan a acudir al Juzgado del Sr. del Olmo, auriga del castellano.
Les daré una idea: si alguna sentencia no les gusta, pueden exclamar: “¡VAYA ASCO CON ESTE JUEZ DEL INFIERNO!”. Si el señor del Olmo se enfada y les abre expediente por desacato, insulto, o algo parecido, pueden decirle que utilizan la acepción de la Enciclopedia Espasa-Calpe, que considera que los ”Jueces del Infierno” son tres: MIDAS, EACO Y RADAMANTO, y que Ustedes se refieren a éste último, pues el Espasa no incluye en la lista a ningún Juez del Olmo. Por tanto, este señor no podrá darse por insultado.
Si el Sr. del Olmo dice que a pesar de todo están hablando de jueces del infierno y que eso es ofensivo en un juzgado, podrán Ustedes decirle que no, y que hablar del RADAMANTO es hacerlo en la acepción de Entomología que lo define como un GENERO DE DERMAPTEROS DE LA FAMILIA DE LOS FORFICULIDOS Y TRIBU DE LOS OPISTOCOSMINOS. ¡Vamos, quién no ha visto alguna vez en un Juzgado a un género de dermáptero de la familia de los forficúlidos y tribu de los opistocosminos! ¡Ah, y de la familia R. Lobophorides, Sr. del Olmo! Seguro que nos denunciará igual, pero este será un buen argumento para la defensa, o para pedir el indulto.
Como el Espasa-Calpe me gusta más que a Borges la Enciclopedia Británica, he mirado además si decir “EL TRIBUNAL DE DEL OLMO VA CONTRA LOS DERECHOS HUMANOS” puede ser punible, pero he visto que tampoco, porque siempre pueden Ustedes decir que se referían al archipopular José Vicente del Olmo, ilustre valenciano que vivió ente 1611 y 1696, y que en 1680 participó como Secretario en el Tribunal de la Inquisición que celebró el Auto de Fe en la Plaza Mayor de Madrid donde hubo 21 víctimas de la locura. Este señor es sobradamente conocido de toda la sociedad española; vamos, cualquier español con graduado escolar que dice “del Olmo” piensa más en éste de hace cuatrocientos años que en el juez de la astuta. Ah, y también es superfamoso en todos los bares y gasolineras un tal Juan del Olmo que en ese mismo año de 1680 escribió un tratado referente a las mujeres de moral distraida, y que seguramente no se referiría a que tales damas fueran de principios vagos sino a que su moral se había distraido al ver el habitual Radamanto, como nosotros.
En definitiva, que conociendo bien la lengua castellana (lo siento por los niños andaluces y gallegos, en la “acepción” del Sr. Mas), pueden Ustedes ir al Juzgado del Sr del Olmo sin ningún miedo, porque pueden Ustedes faltarles a todos incluyendo al Sr. Juez sin ningún problema ¡¡Qué alivio!!
Esta ha sido la de CAL. Para otro día la de ARENA, con una buena reflexión sobre qué pasa realmente con estas sentencias, por qué unos jueces se ven en la facultad y otros en la obligación de dictar sentencias aparentemente bizarras, cuando lo que están haciendo es sufrir las consecuencias de una política legislativa errática, demagógica en ocasiones y técnicamente mala, impulsada por unos políticos que queriendo sobreproteger (y no discuto eso) a cierto sector social, lo hacen introduciendo en el puzzle jurídico piezas de otro que no sólo no consiguen lo que quieren sino que desbaratan el que ya había. Pero esto ya es cosa de pensar, y yo hoy no puedo ni ellos en este milenio, así que sigamos mirando el bicho dermáptero de la familia de los forficúlidos y tribu de los opistocosminos, de la familia R. Lobophorides (quien sepa reconocerlo), que mañana será otra noche.
"La justicia es un cachondeo"
ResponderEliminarPedro Pacheco (Alcalde andalucista de Jerez de la Frontera 1979-2003)
Estoy citando lo que dijo un prócer público. No me pueden meter en la cárcel.
¿O sí, Corsario? Si es así y me quiere bien, borre este comentario.
Jeje.
Yo, particularmente, no entiendo la justicia de los hombres.
La de los elfos un poco.
Bueno, creo que no vas a la cárcel, pero si vas iríamos los dos (no sé si esto te alegra o te espanta), por permitir yo tu comentario.
ResponderEliminarDe todas formas, siempre podríamos apelar a la "acepción" latinizante, y decir que nos referimos a que "la Justicia es una parte del altísimo", pues cachondeo es realmente: "cacho in deo", según el María Moliner en versión rastro. No sufras, que si algo pasara nos haríamos de un grupo de liberación regional y en dos días estábamos fuera.